Ante los niveles críticos que presenta la represa de Chingaza, la principal fuente de abastecimiento de agua para la capital colombiana, el Distrito ha anunciado un plan de racionamiento que entrará en vigor a partir de la próxima semana. La gerente del Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, Natasha Avendaño, detalló en una entrevista en Blu Radio con Néstor Morales, cómo funcionará este plan, las razones detrás de esta decisión y las medidas preventivas a tomar.
Según Avendaño, el racionamiento se implementará dividiendo la ciudad en zonas, cada una con restricciones específicas de abastecimiento. El anuncio completo de estas medidas se realizará el próximo lunes 8 de abril, donde se darán a conocer los horarios y la duración de las restricciones por zonas, así como la rotación de las mismas.
Los niveles del sistema Chingaza han alcanzado los más bajos de los últimos 40 años, con una capacidad crítica en los embalses de Chuza y San Rafael, con unos 47 millones de metros cúbicos de agua a la fecha. Avendaño explicó que esta situación es producto del fenómeno del Niño, relacionado con el cambio climático global. Los embalses de Chingaza se llenan y vacían anualmente, pero en los últimos años, el inicio de los períodos de lluvia ha sido cada vez más tardío y menos abundante, lo que ha llevado a una disminución significativa en los niveles de agua.
“Con las dinámicas de cambio climático hemos venido viendo como cada vez ese arranque, es decir, el nivel con el que termina el periodo de lluvias, el llenado es cada vez menor y efectivamente hoy estamos en unos niveles inferiores al 18 % en el sistema como tal”, explicó la gerente.
En cuanto a las alternativas para paliar esta situación a largo plazo, Avendaño mencionó estrategias de conservación de la estructura ecológica principal, protección de cuencas y reforestación. Sin embargo, advirtió que se necesitará una conversación sobre las fuentes de abastecimiento para los próximos 50 años.
Ante la necesidad inmediata de reducir el consumo de agua, Avendaño hizo un llamado a la conciencia ciudadana para implementar medidas de ahorro. Recomendó reducir el tiempo de las duchas, cerrar la llave al cepillarse los dientes, utilizar la lavadora de manera eficiente y evitar el riego de jardines y lavado de vehículos con manguera. La doctora destacó que el 58 % del consumo de agua en Bogotá se destina al aseo personal, por lo que instó a la población a ser consciente de cada gota utilizada. Además, hizo un llamado a las industrias y al sector productivo a implementar prácticas de reúso del agua.
“Buscar el cambio en la cotidianidad a veces es difícil y es incómodo, pero necesitamos ser conscientes de que cada gota que malgastamos o que se va no siendo aprovechada es una gota que nos hace falta para garantizar el abastecimiento aquí. Ponernos todos en modo ahorro”, sentenció Avendaño.
El Distrito espera que con estas medidas de racionamiento y el compromiso ciudadano, se pueda enfrentar de manera efectiva la crisis hídrica que enfrenta Bogotá, asegurando así el suministro de agua para sus habitantes en los próximos meses.
