La Secretaría de Salud de Bogotá ha emitido una alerta ante el preocupante aumento en los casos de enfermedad diarreica aguda durante la segunda semana de abril. Este incremento ha generado preocupación en las autoridades sanitarias, quienes aún no han determinado las causas exactas detrás de este repunte.
El doctor Henry Mendoza, destacado infectólogo de la Clínica del Occidente, ha explicado que el aumento de las lluvias puede estar vinculado con la contaminación del agua, lo que incrementa la frecuencia de los virus que actualmente están afectando a la población bogotana.
“No se trata de un solo virus”, enfatizó el doctor Mendoza. “Las manifestaciones clínicas que estamos observando en Bogotá están asociadas a varios virus, como los enterovirus abdominales, norovirus, astrovirus y el rotavirus, este último especialmente peligroso para los menores de 5 años”.
Aunque el racionamiento de agua por el que atraviesa la capital no está directamente relacionado con estas infecciones, el especialista advierte sobre la contaminación que puede acompañar a las lluvias, exacerbando el problema.
El lavado de manos se erige como una medida crucial en la prevención de estas enfermedades. A pesar de la importancia de utilizar el agua de manera racional, no se debe descuidar esta práctica, ya que los virus mencionados se propagan rápidamente y se transmiten principalmente a través de las manos. El uso de agua y jabón es efectivo para eliminarlos.
El doctor Mendoza también alerta sobre la presencia del virus de la Hepatitis A, el cual también puede causar diarrea, vómitos y dolor abdominal, y que ha experimentado un aumento en Bogotá, Medellín y otras ciudades del país. En este sentido, destaca la importancia de mantener actualizado el esquema de vacunación como una medida preventiva.
Para prevenir el contagio de virus gastrointestinales, la Secretaría de Salud ofrece las siguientes recomendaciones:
- En ausencia de agua y jabón, utilizar gel antiséptico o alcohol para limpiar las manos antes de comer, durante la manipulación de alimentos, después de usar el baño o de haber estado en espacios públicos.
- Lavar minuciosamente los alimentos antes de consumirlos y cocinarlos a fondo.
- Mantener una alimentación saludable.
- Consumir agua limpia, potable o hervida.
- Mantener el esquema de vacunación actualizado.
- Ante la aparición de síntomas como fiebre persistente superior a 39°C, diarrea o vómitos más de cuatro veces en una hora, debilidad, adormecimiento, resequedad en los labios o disminución significativa de la producción de orina, se recomienda acudir de inmediato a centros médicos para recibir atención especializada.
Las autoridades sanitarias hacen un llamado a la población a mantener la calma, seguir las medidas preventivas recomendadas y buscar atención médica oportuna en caso de presentar síntomas relacionados con estas enfermedades.