“La emoción y el orgullo de los salvadoreños de votar en libertad en cualquier parte del mundo, acompaño la últimas elecciones en el país centroamericano que le otorgó un contundente respaldo a Nayib Bukele (Partido Nuevas Ideas) para un segundo mandato.
Después de 22 prórrogas del régimen de excepción se detuvieron a más de 75.000 personas. Reducir a menos de un digito los indices de violencia en el país.
El “cambio de gobernabilidad y gobernanza en El Salvador se ganó con votos en las urnas, bajo la libertad y respeto de la Constitución. La intención de un país que reclamaba un cambio de paradigmas se tradujo en respaldo abrumador para Nayid Bukele para su reelección presidencial”. (Hecho histórico con impacto mundial).
De entrada, Nayib Bukele no solo alcanzó su objetivo, en medio de las críticas de la oposición, sino que además logró el control del Congreso de la República, desde donde impulsa una agenda legislativa de lucha frontal contra el crimen organizado y proyectos de ley, orientados a la recuperación económica.
Antes de la llegada al poder de Nayib Bukele, El Salvador tenía en “cáncer” en los cuatro puntos cardinales en el país. “El 85 por ciento del territorio estaba controlado por pandillas en camino a la metástasis”.
En palabras de Nayib Bukele su primer mandato logró hacer una “quimioterapia tan profunda que se convirtió en eco internacional sin precedentes, al punto que hoy, los salvadoreños le apoyaron en las urnas en más del 85 por ciento”.
La meta, en los años que están porvenir, es que el país sane completamente de los violentos, la violencia y el narcotráfico. “La tarea en la recta final del segundo semestre de 2024, es la recuperación económica con educación de calidad, productividad y acompañado por la academia, los gremios, ciudadanos y medios de comunicación.
“Estamos orgullosos de ser salvadoreños. En libertad votamos por la propuesta de Gobierno de Nayib Bukele para segundo mandato”, dice los ciudadanos centroamericanos radicados en Miami, New York, Madrid y Barcelona.
Desde el análisis de la comunicación política, El Salvador de la tercera década siglo XXI, está inmersa en un nuevo cambio de paradigma.
Un paradigma que apunta a disminuir las remesas desde el exterior como política de desarrollo. “Otorgarle a la educación, el turismo, la cultura, la seguridad alimentaria y el mejoramiento del sector salud el protagonismo con una visión 2050”.
Lo que queda claro, es que el proyecto de Estado de combatir al crimen organizado en El Salvador, no solo ha sido visible en el país sino en América Latina, gracias a la gestión con resultados. Coherencia en el discurso y en la acción de Gobierno. “Un respaldo mayúsculo de los ciudadanos en el país y el extranjero”.
Para el tribunal electoral en El Salvador, la votación del pasado mes de febrero de 2024 fue un éxito. “Tanto por la participación masiva de ciudadanos como por la efectividad del voto electrónico”
“Los centros de votación de cerraron en la hora indicada. Además, el voto electrónico en el exterior -en 81 ciudades del mundo- El primer país que voto fue Australia.
Un ejemplo en la construcción de democracia desde el voto informado y libre. “Nadie restringió el ejercicio del sufragio durante la jornada electoral. Con el proceso ganaron los ciudadanos, Nayid Bukele habilitado para su segundo mandato con un cifra récord de votos a nivel orbital en el siglo XXI.
Es el porcentaje más alto de un triunfo en la historia del país centroamericano. (obtuvo 85 por ciento de los votos. 58 diputados de 60 en la Asamblea Legislativa)
Es un resultado en las urnas, donde se otorgó al “Partido Ideas” una confianza ciudadana para actuar en la reconstrucción de El Salvador desde los cimientos.
Nayib Bukele está defendido su modelo de país con acciones de gerencia pública. “Cerrándole el paso a quienes hacen del populismo de izquierda una autopista para la corrupción, el desgobierno y ausencia de tejido social empresarial”.
