En Colombia, las motocicletas se han convertido en el medio de transporte preferido, con más de 11,9 millones de unidades registradas hasta mayo de 2024. Sin embargo, esta cifra también refleja una realidad preocupante: los motociclistas son los actores más vulnerables en las vías, enfrentando un mayor riesgo de sufrir siniestros graves o fatales. Un estudio del Ministerio de Salud reveló que el trauma craneoencefálico es la principal causa de muerte y lesión en motociclistas tras un incidente de tránsito. Estas consecuencias podrían reducirse significativamente si los motociclistas usaran cascos que cumplan con las normas de seguridad y los usaran correctamente.
La Cámara de la Industria de Motocicletas de la ANDI, a través de su iniciativa de prevención y seguridad vial, Movemos Colombia, recomienda el uso de cascos certificados y su correcta utilización. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un casco adecuado puede reducir en un 40% el riesgo de muerte y en un 70% la gravedad de las lesiones. Para garantizar la máxima protección, se deben seguir tres pasos esenciales al usar un casco: elegir uno que cumpla con certificaciones como ECE 22.05 o 22.06 (Europa), FMVSS 218 / DOT (Estados Unidos) o NTC 4533 (Colombia); asegurarse de que el casco esté ajustado firmemente a la cabeza; y abrocharlo correctamente. Iván García, director de la Cámara de la Industria de Motocicletas de la ANDI, advierte que “un casco que no esté debidamente ajustado y asegurado no proporciona la protección necesaria y pone en riesgo la vida del motociclista”.
Además de un ajuste perfecto y un buen abrochado, el casco debe cumplir con normativas de seguridad vigentes, como una coraza exterior dura, medios adicionales para absorber la energía del impacto y un sistema de retención. También puede incluir aletas para las orejas, una cortina para el cuello, una visera desprendible, un visor y una cubierta facial inferior. El casco debe permitir una buena audición y contar con ventilación adecuada para evitar el sobrecalentamiento. Este nivel de especificación no es un lujo, sino una necesidad para garantizar la seguridad del motociclista. Tanto el piloto como el copiloto pueden ser multados por el uso incorrecto del casco, con sanciones que pueden alcanzar los $650.000 pesos si no se lleva bien abrochado o ajustado.
Para mejorar la seguridad de los motociclistas colombianos, el Ministerio de Transporte expidió la resolución 20233040005155 de 2023, que permite la comercialización de cascos certificados bajo las normas internacionales más actualizadas. Esto elimina barreras para que los motociclistas puedan acceder a los mejores productos disponibles en el mercado. Sin embargo, no todos los cascos son iguales y algunos no cumplen con los estándares de seguridad necesarios. Movemos Colombia recomienda evitar el uso de cascos de bicicleta, cascos de skate y cascos vintage o retro, ya que no ofrecen la protección adecuada. La prioridad debe ser siempre la seguridad, optando por un casco certificado, bien ajustado y abrochado. La vida de un motociclista depende de las buenas decisiones que tome antes de salir a rodar.
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