El metabolismo, motor del cuerpo humano, es influenciado por diversos factores como la edad, la actividad física y la nutrición. La Dra. Claudia Sánchez, directora Médica de Abbott en Colombia, destaca cinco aspectos esenciales para impactar positivamente en este sistema vital:
- Priorizar la Proteína La proteína es fundamental para múltiples procesos corporales, incluyendo el mantenimiento muscular y la sensibilidad a la insulina. Según estudios recientes en EE.UU., muchas personas no consumen suficiente proteína diariamente, lo que puede afectar la salud metabólica y la capacidad física.
- Asegurar Fuentes de Energía Los carbohidratos y grasas saludables son esenciales para proporcionar energía al cuerpo. Además de ser combustible para los músculos durante el ejercicio, estas sustancias son vitales para el cerebro y la producción hormonal.
- Optar por Vegetales Coloridos Incluir una variedad de verduras sin almidón en la dieta no solo mejora la ingesta de antioxidantes, vitaminas y minerales, sino que también promueve una salud digestiva y metabólica óptima. La fibra presente en estos alimentos ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre.
- Integrar Alimentos Nutricionalmente Completos Al elegir alimentos, es crucial seleccionar opciones que sean altas en proteínas, grasas saludables y fibra. Reducir el consumo de alimentos azucarados y optar por alternativas más nutritivas puede beneficiar significativamente el metabolismo.
- Agregar Más Movimiento La actividad física regular es clave para mejorar el metabolismo. Según la OMS, los adultos deben realizar al menos 150-300 minutos de actividad aeróbica moderada por semana, complementada con ejercicios de fortalecimiento muscular. Incluso caminar después de las comidas puede ayudar a regular el metabolismo y mejorar la digestión.
Bonus: Cambio, Medición y Repetición Hacer ajustes graduales en la alimentación y el estilo de vida, junto con el aumento de la actividad física, son fundamentales para mejorar la salud metabólica a largo plazo. Es importante adaptar estos cambios según las necesidades individuales y bajo la guía de profesionales de la salud.
Adoptar estos principios puede marcar una diferencia significativa en la salud metabólica personal, promoviendo un bienestar general y sostenible a lo largo del tiempo.



