En junio, la ciudad de São Paulo, Brasil, fue el epicentro de la tecnología y los negocios con la celebración del Universo TOTVS 2024. Este evento, que congregó a un impresionante récord de 16 mil asistentes en sus dos días de actividades, se destacó por abordar un tema crucial: el impacto de la inteligencia artificial (IA) en la vida cotidiana y los negocios. En la conferencia inaugural, titulada “La inteligencia artificial ya es realidad en TOTVS”, Dennis Herszkowicz, presidente de la compañía, presentó una visión detallada sobre cómo la IA está transformando tanto a las empresas como a sus operaciones internas. Herszkowicz delineó cinco pasos fundamentales para la implementación efectiva de proyectos de IA, brindando a los asistentes una guía práctica para integrar esta tecnología en sus organizaciones.
El primer paso esencial, según Herszkowicz, es la identificación de necesidades y oportunidades. Este proceso comienza con un mapeo preciso de los problemas y áreas donde la IA puede añadir valor. Herszkowicz destacó la importancia de centrarse en aspectos como la automatización de tareas, la personalización de productos y la innovación en procesos existentes. Este paso inicial no aborda las complejidades técnicas, sino que se enfoca en comprender las necesidades del negocio. La identificación del “pain point” o problema a resolver, las implicaciones objetivas para el negocio, y la definición del perfil de usuario son componentes clave. La formulación de hipótesis sobre la solución de IA y la selección de KPIs adecuados son vitales para medir el impacto de la tecnología en la eficiencia operativa y la satisfacción del cliente.
El siguiente paso implica la capacitación y entrenamiento de equipos, un aspecto crucial para el éxito de cualquier proyecto de IA. Herszkowicz subrayó la importancia de invertir en formación, ya sea a través de programas internos o asociaciones con instituciones educativas. “La capacitación de equipos es clave para el desarrollo y la implementación exitosa de tecnologías de IA,” comentó el ejecutivo. TOTVS, por ejemplo, está capacitando a sus empleados actuales para convertirlos en expertos en IA, destacando que el conocimiento previo en IA no siempre es necesario, sino que la formación continua es fundamental para aprovechar al máximo estas tecnologías emergentes.
La selección de tecnología y herramientas es el tercer paso, que requiere una evaluación cuidadosa de las opciones disponibles para cada empresa. Herszkowicz enfatizó que no existe una solución universal y que la elección de herramientas debe adaptarse a las necesidades específicas de cada organización. Las estrategias pueden variar desde utilizar agentes de IA preentrenados hasta desarrollar modelos personalizados desde cero. Además, es crucial considerar la infraestructura necesaria y los costos asociados con el desarrollo y mantenimiento de soluciones de IA. La estrategia de uso del modelo de IA, la disponibilidad de datos y los requisitos de infraestructura son factores determinantes en esta fase.
Finalmente, el desarrollo e implementación de un proyecto piloto es esencial para validar la efectividad de las soluciones de IA antes de una implementación a gran escala. Herszkowicz recomendó realizar pruebas piloto para ajustar estrategias y resolver desafíos antes de una adopción completa. “El piloto le permitirá probar la eficacia y el valor de la tecnología de IA antes de comprometerse a una implementación más amplia,” explicó el presidente de TOTVS. Evaluar los resultados del piloto y perfeccionar los enfoques es crucial para asegurar que la solución de IA cumpla con los objetivos de negocio y genere los beneficios esperados.
En resumen, el Universo TOTVS 2024 subrayó la importancia de la inteligencia artificial como una herramienta transformadora en el ámbito empresarial. A través de la identificación de necesidades, capacitación de equipos, selección de tecnologías adecuadas, pruebas piloto y evaluación de resultados, las empresas pueden implementar proyectos de IA de manera efectiva y estratégica. Este enfoque metódico no solo facilita la integración de la IA en las operaciones empresariales, sino que también asegura que la tecnología aporte un valor real y medible a las organizaciones.
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